La táctica publicitaria de la recomendación (de marca o producto) realizada por un personaje famoso, fuese real (Carmen Sevilla y Philips) o ficticio (Santa Claus y Coca Cola), data de varias décadas.
El fin es lograr que estos llamados influencers saquen provecho de su capacidad de recomendación para que otros elijan la marca, servicio o producto indicada.
Con la llegada de Internet y especialmente las redes sociales, el Influencer Marketing se potencia y realiza un giro: si bien antes un «embajador de marca» podía ser solamente alguien famoso, hoy en día la red permite que cualquier persona se convierta en influencer, siempre y cuando tenga una audiencia suficientemente importante para la marca en cuestión, y esté compuesta por un perfil al cual se dirige el producto o servicio.
Económicamente es también un gran cambio. Los contratos de representación mediática se están dirigiendo cada vez más hacia bloggers y otro tipo de influencers, a los que se encomienda la promoción de sus bienes.
¿Ventajas?
Las más importantes son la compensación económica, el contenido generado por el propio usuario y el auge de influencers anónimos. Hoy día es bien sabido que cualquier persona común puede llegar a convertirse en una celebrity digital. El campo está abonado.
Youtube e Instagram son los canales más valorados. Quien cuente con un número importante de seguidores en alguna de estas redes sociales, entrará en esta categoría y pronto puede que le lleguen ofertas por parte de grandes firmas y agencias especializadas.
¿Eficaz?
La publicidad va de la mano de la psicología, así que para empezar diremos que el factor psicológico es la clave del éxito: las personas son mucho más susceptibles de ser influenciadas por personas que admiran o estiman.
Si sumamos la creciente sordera/ceguera desarrollada por los consumidores ante la avalancha de impactos publicitarios diarios, al boom de la comunicación a través de redes sociales, el resultado será un mensaje publicitario eficaz, difundido veloz y económicamente. ¿Quién se puede resistir a esta estrategia publicitaria?
Si todavía existen dudas, vamos a por unos cuantos números obtenidos en informes estadísticos sobre el Influencer Marketing:
– el 94% de los marketers que optan por ésta, considera que es muy efectiva.
– es el canal de mayor crecimiento y más efectivo en términos de costes.
– el 83% de los consumidores confían ciegamente en recomendaciones de amistades y familiares.
– el 66% de los usuarios de internet dicen confiar en las opiniones publicadas en redes sociales por otros usuarios.
– los consumidores cada vez son más inmunes a la publicidad tradicional.
– las redes sociales exponen las marcas constantemente, 24/7/365.
– el 92% de los consumidores acude a personas conocidas para obtener opiniones, antes que cualquier otra fuente.
– la fidelidad es un 37% más elevada en clientes ganados a través de recomendaciones.
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| Dulceida |
Sigue y seguirá existiendo el tipo de campaña tradicional, en el que podremos ver a actrices o deportistas recomendando tal o cual marca, pero el público sabe que detrás de este anuncio existe un acuerdo comercial. Puede causar rechazo en algunos casos. En el caso de los influencers, su ratio de engagement está basado en otros factores. En la mayoría de los casos el discurso es más cercano, sin guiones, y lo hacen a través de sus canales personales, entrando de lleno en el poder del mensaje emocional.
Ahora sería el momento para entrar con mayor profundidad en este terreno, y hablar también de los microinfluencers, que están causando furor y garantizan una nueva (micro)revolución en las redes… pero ¡lo dejaremos para otro post!
Os invitamos a curiosear esta lista publicada por Trendencias, con las 28 instagrammers y bloggers más influyentes del año.
Feliz Semana Santa a todxs…
