La experiencia del cliente con la marca conlleva siempre una emoción, que propicia o destruye el valor del producto, marca o servicio. El cliente siente, aprueba o descarta, y opina…
Según un estudio en USA los resultados son claros: para el cliente el vínculo se crea al sentirse «valorado, cuidado, feliz y contento».
¿Aún dudamos sobre la importancia de emocionarle?
Para saber más sobre el estudio: http://bit.ly/1dKIx25
¡Feliz lunes!